26 abril 2010

LAS CARTAS QUE SIEMPRE ESPERÉ...


Es el título de el último libro que lei. Fue este fin de semana en la intimidad de mi departamento. El libro llegó el jueves a mis manos, después de tener que importarlo gracias a una amiga librera. Es de una autora catalana llamada Maria de la Pau Janer y me lo había referido una amiga coleccionista de Puntos de Libro, hace unos meses atrás.

A ella y a mi también, nos llamó la atención que uno de los personajes fuera coleccionista de estos objetos. Fue la única razón para que yo hiciera las gestiones para traer el ibro a Chile y poder leerlo.

Transcribo para ustedes el diálogo que motivó la compra del texto:
-¿Por qué crees que decidí empezar una colección de marcapáginas? -¿Por qué? -La razón es sencilla: es una colección que no tiene final. Cada dia aparecen nuevos marcapáginas, siempre se puede seguir (o continuar). Es bueno querer aquello que nos sorprende. "


Cariños a todos quienes lean esto

23 abril 2010

23 de abril Día Internacional del Libro


Hoy se conmemora un año más del Día Internacional del Libro.

En Chile para celebrarlo, 5 bibliotecas están exhibiendo parte de mi colección de marcapáginas.

Les dejo los link correspondientes y las fotos las subiré en cuanto me las envíen.
www.bibliotecaregional.blogspot.com

www.australosorno.cl

http://www.uss.cl/biblioteca/noticias.php?s=20100413142533

http://www.diariollanquihue.cl/prontus4_nots/site/artic/20100420/pags/20100420001039.html

http://www.universia.cl/portada/actualidad/noticia_actualidad.jsp?noticia=154196

http://www.alperit.cl/node/619

21 abril 2010

ALMA DE RECOLECTORES...Vivienda y Decoración. Stgo 17 abril 2010 p.20-22










Hay quienes juntan objetos por el simple placer de tenerlos. No importa si son valiosos o antiguos, el tema es acumularlos y armar una colección propia que deleite sus ojos y su instinto recolector.


Texto, Soledad Salgado S. Producción, Paula Fernández T. Fotografías, Viviana Morales



De la cocina al muro
Andrés Mekis es un acumulador por excelencia. Como buen arquitecto es amante del diseño de ciertos objetos y se maravilla con sus formas y colores. Le pasó con los autos en miniatura, con las esferas de relojes antiguos y también con los sacacorchos, llegando a tener de estos últimos más de 150 modelos. "Cada vez es más difícil encontrar piezas nuevas, me he puesto exquisito", comenta. La colección la comenzó hace como 20 años atrás, en una de sus tantas idas al persa de Franklin. Allí encontró un viejo diseño al que ha ido sumando otros más modernos y exóticos. Tiene algunos de más de cien años, otros con aplicaciones de cacho de jabalí o nácar, y de diversos países, algunos de los cuales nunca han sido usados. Un buen amigo le trajo uno de París junto con un libro dedicado a los sacacorchos y su historia según las épocas. "Me di cuenta de que tenía muchos de esos modelos", comenta. Hoy los luce en uno de los muros de la cocina.
Sillas a escala
La decoradora Ximena Tannenbaum juntó perfumeros por años, llegó a tener 300. Luego siguió con los pisapapeles, hasta que decidió regalarlos a algunos amigos. Hoy le quedan no más de ocho o diez, y los tiene en un mueble estantería que ocupa gran parte de la pared del living. Claro que éstos ya no tienen el protagonismo que sí ha adquirido una serie de sillas miniatura de los más variados estilos. Comenzó esta colección hace cinco años cuando vio una silla Art Decó que estaba a la venta, "realmente aluciné y empecé con ese jueguito de comedor", cuenta. Hoy tiene diversos ejemplares, algunos clásicos como la silla Macintosh o la Zig Zag; muchas de la tienda STGO/MILAN. Y también cuenta con algunas curiosidades, como un juego de comedor de latón al que no pudo resistirse en Buenos Aires. "La gracia es ir de a poco. No sabes el placer que es ir encontrándolas", agrega.

Toques femeninos.
Karina Berrier, socia de El bazar de la Fortuna, es una amante de los objetos enlozados porque en general tienen motivos y colores muy delicados, "hay hartos con flores, muy femeninos", explica. En su tienda exhibe una preciosa colección de jarritos de juguete de este material, que ha ido acumulado con el tiempo, de la mano de su socia Carolina Peña. Su gusto también entró a su casa. Allí, en uno de los muebles del comedor tiene una serie de enlozados que van desde azucareros hasta mates, pasando por teteras. "Me gustaban mucho los azucareros, me atraía su forma simple y la nostalgia que traían porque cuando empecé a juntarlos, hace como doce años, estaban bien dejados de lado", indica. Tiempo después fue a una feria de las pulgas y vio una tetera celeste, grande y que le pareció preciosa, "encontré que era como un azucarero grande; la compré y así seguí coleccionando ambos objetos". Además de ellos Karina ha sumado una serie de mates enlozados, la mayoría encontrados en Argentina durante los paseos que hace con una tía anticuaria que vive en Buenos Aires. "Me he traído unos muy bonitos, baratos y en perfecto estado". Reconoce que le encanta el brillo de los enlozados y la posibilidad de que duren muchos años, "ya que como somos un país sísmico lo más probable es que la loza no dure, pero sí estas sencillas piezas".

La historia en una piedra .
Hace 140 millones de años existía un tipo de molusco llamado amonites. En la actualidad, el arquitecto Osvaldo Fuenzalida, tiene cerca de 25 de ellos puestos en un mueble hecho especialmente para exhibirlos en el comedor. Les mandó a hacer unos pequeños pies de fierro para lucirlos a modo de pequeñas esculturas. "Estos antiguos fósiles están repartidos por todo el planeta. Yo tengo de Madagascar, Brasil, Ucrania y Chile", explica. De ellos lo que más le llama la atención al profesional es la perfecta composición que tienen, como especies de conchas con calados simétricos. La primera vez que vio uno fue en un paseo al Cajón del Maipo, "parecía una piedra, pero tenía una textura diferente", recuerda. Junto a un amigo rompieron la pequeña roca y al centro apareció el amonites fosilizado. Por supuesto, cada uno se quedó con una mitad.
"Esto no pretende ser parte de un museo, ni mucho menos. Los busco por su belleza, ni siquiera por su antigüedad", agrega Fuenzalida.

Dulce compañía.
Fue la mamá de la decoradora María José Tagle, Gabriela Balbontín, quien la sumergió en el arte de la acumulación. Todas las colecciones que tiene se las ha empezado ella, regalándole uno o dos objetos originales que la incitan a seguir juntando. Hace 30 años, estando recién casada recibió de parte de su madre un gran molde de loza para hacer dulces que tenía forma de león. "Era grande, pesado, profundo y de una forma muy entretenida", dice. Luego se compró uno en una tienda de anticuarios y no paró más, hasta tener un interesante grupo de moldes antiguos que exhibe en una de las repisas junto al comedor. Algunos están sólo de adorno, pero los más pequeños los usa para hacer dulce de membrillo o camote. "Por separado quizás no tienen gran valor -a pesar de ser todos antiguos- pero juntos se potencian", explica. Sus amigas ya saben de su afición por el coleccionismo, de hecho también junta salseras, y más de alguna le ha ayudado a incrementar el número de diseños.




Nota reproducida con autorización de la Periodista.

15 abril 2010

Marcapáginas para taller de Francisco Mouat


Marcapáginas diseñados para el taller de libros y escritura de Francisco Mouat "Escribir con Pasión".Las ilustraciones fueron hechas pensando en el tema de los libros y en el taller, pero fueron propuestas libres de restricciones. A eso se debe la diversidad de técnicas. Ilustraciónes y diseño: Bernardita Espinoza


13 abril 2010

MIS MARCAPÁGINAS EN UNIVERSIDAD SAN SEBASTIAN, OSORNO, CHILE



Universidad San Sebastián conmemora Día del Libro
Osorno, 13 de abril

Con una exposición de marcapáginas, la biblioteca de la sede de Osorno de la Universidad San Sebastián celebrará el Día Internacional del Libro.


A partir de este viernes 23 de abril, una extensa colección de marcadores de textos podrá ser visitada en el hall de acceso de la sede, con motivo del Día Internacional del Libro y del Derecho de Autor, que coincide con el fallecimiento de nombres ilustres de la literatura mundial como William Shakespeare, Miguel de Cervantes e Inca Garcilaso de la Vega, entre otros.


La muestra busca acercar a los asistentes al mundo de la lectura y estimular su interés y gusto por conocer nuevas realidades e historias a través de la palabra escrita. Permanecerá abierta hasta este 30 abril.


Los marcalibros en exhibición pertenecen a la coleccionista chilena Olga Sotomayor.


08 abril 2010

Libro "La nieve roja"..incluye relato "El Marcapáginas"


Hoy navegando en internet encontré la reseña de este libro y oh sorpresa!!!!! contiene un relato llamado "El marcapáginas". Me parece una joya. Voy a tratar de ubicarlo acá en Chile. Es rarísimo que estos objetos sean parte de novelas, cuentos y otros relatos. Seguiré buscando y por ahora los dejo con los datos del texto por si alguién lo encuentra o se anima a comprarlo o leerlo para después comentarlo.

Kryzanowski, Sigismund. La nieve roja y otros relatos. Ediciones Ciruela